Ana Isabel Briones García
Se trata de buscar en la narrativa policiaca española de los años ochenta aquellos autores y obras que, sirviéndose de un uso irónico del género policiaco, pretenden llevar a cabo una cierta revisión o recuperación de hechos históricos del pasado nacional reciente, concretamente de los años de dictadura. El recurso al género policiaco no es, sin embargo, en los autores seleccionados una vía para parodiarlo, sino para recrearlo con otros fines de los tradicionales. Se acercan así a lo que, dentro del debate sobre el Postmodernismo, se conoce como novelas postmodernas historicistas. Dentro de la producción narrativa policiaca en España, se han seleccionado las obras que incluyen un contenido histórico-político y que, además, recrean de formas más o menos consciente ciertos elementos estructurales del género. De manera que se analiza, como máximo representante, Asesinato en el Comité Central, de Manuel Vázquez Montalbán. Pero también, en un segundo plano, Caronte aguarda, de Fernando Savater; Beltenebros, de Antonio Muñoz Molina; Gálvez en Euskadi, de Jorge Martínez Reverte; y ¿Quién mató a Felipe?, de Pedro Casals