La Transición española trajo consigo un pacto del olvido. Un olvido que se manifestó de muchas formas: desde no exigir responsabilidades políticas o penales, hasta la voluntaria amnesia de la Historia más reciente del país para conseguir, desde el consenso, un sistema político democrático. La nueva cultura surgida del pacto del olvido no buscó explicaciones históricas, había nacido precisamente de esa carencia de memoria. Este estudio analiza, a través de dos ejemplos significativos y dispares, la obra Intersecciones (1991), de Haro Ibars, por un lado; y de la película Amanece que no es poco (1989), de José Luis Cuerda, por otro. Dos obras y autores, que, a pesar de sus diferencias, tienen en común el encontrarse ambas en la marginalidad, es decir, están situadas en las grietas, en las fisuras que la reforma de la Transición española arrastró con su pacto del olvido.
The Spanish Transition was based upon an act of oblivion. The will to build a consensual democratic system was articulated through strategic forms of oblivion, including the decision to overlook political and juridical responsabilities and the voluntary blackout, or amnesia, that left the country's recent historical events in the dark. The new culture that arose from the act of oblivion refused to search for historical interpretation; on the contrary, it appears to be the result of this very lack of memory. My paper is a study of two significant works that provide different examples of similar historical conditions: Eduardo Haro Ibars' Instersecciones (1991) and José Luis Cuerda's Amanece que no es poco (1989). Although essentialy different in its approaches, both have in common its marginality: they are located in, and created from, the folds and non-sites generated by the Spanish Transition's pact