La investigación de las nuevas variedades del inglés (New Englishes) se ha centrado de forma significativa en los últimos treinta años en identificar en qué punto y en qué medida se desvían estas variedades de inglés de la forma nativa o de variedades antiguas (típicamente el inglés británico y americano). Consideradas y tratadas a menudo como fruto de una adquisición deficiente o inadecuada del inglés nativo, estas variedades del inglés se han interpretado conceptualmente como (growing) entidades "creciendo" (growing), "avanzando" (advancing), y "madurando" (maturing) de forma progresiva hacia las variedades de inglés nativo o antiguas. Este artículo rebate esta noción de "maduración" (maturation) y más bien propone que las nuevas variedades del inglés están evolucionando de acuerdo a las realidades ecológicas de sus contextos actuales.
Research on New Englishes in the last thirty years was grossly directed at identifying at what point and to what extent these varieties of English deviate from the native or older varieties (typically British and American). Considered and often treated as fruits of deficient or inadequate acquisition of the native, these Englishes have been conceptually interpreted as growing or advancing or maturing in a progressive manner towards the native or older Englishes. This paper refutes this notion of maturation and rather proposes that New Englishes are evolving according to the ecological realities of their present contexts