Es de gran interés La Virgen de los Reyes Católicos para la Historia del Arte ya que este cuadro une dos géneros pictóricos, primero el cuadro religioso a través de la representación de una Virgen entronizada y, luego, el retrato, o más precisamente el retrato real. Este cuadro, que en los primeros tiempos se encontraba en el convento Santo-Tomás de Ávila, fue realizado gracias al mecenazgo de Isabel la Católica y de su confesor, fray Tomás de Torquemada, Gran Inquisidor. El análisis revela que la puesta en escena de la devoción real tiene que comprenderse como una construcción ideológica al servicio del poder.
La Virgen de los Reyes Católicos présente un grand intérêt pour l¿histoire de la peinture occidentale puisque cette ¿uvre réunit deux genres picturaux, le tableau religieux tout d¿abord à travers la représentation d¿une Vierge en majesté, et, ensuite, le portrait, ici portrait royal. Le tableau, qui se trouvait initialement au couvent Saint-Thomas d¿Ávila, est sans doute dû au mécénat conjoint d¿Isabelle et de son confesseur, le frère Thomas de Torquemada qui était Grand Inquisiteur. L¿analyse révèle que cette mise en images de la dévotion royale est en réalité une sorte de construction idéologique servant le pouvoir.