Ksenija Bilbija
Partiendo de la publicación de El hombre artificial de Horacio Quiroga en 1910, tomando en cuenta el cuento de Borges Las ruinas circulares (1940) y dedicándose al análisis de El ojo de la patria de Osvaldo Soriano (1992), este ensayo elabora el tema de la concepción y animación del ser humano fuera del útero materno. Mientras que las cuestiones morales y filosóficas, igual que las inseguridades ontológicas relacionadas con la producción de una subjetividad nueva al principio y la primera mitad del siglo, tenían que ver con una fe ilimí-tada en la tecnología y con el deseo de identificar el poder central del universo, el cierre del siglo, y a la vez del milenio, está representado en la visión de Soriano de un universo no solo sin Dios (derrumbado en el siglo anterior), sino también marcado por la falta de esencia y memoria. La idea del poder hegemónico y central parece fuera de la condición posmoderna, y lo que nos agobia a finales de siglo parece ser la pérdida del Otro (amado u odiado) y el descubrimiento de que somos el Otro, y que, siendo así, no podemos luchar contra el Otro porque nos destruiríamos a nosotros mismos.
¿Cómo se experimenta la sensibilidad de este siglo que llamamos nuestro desde la pers-pectiva de Buenos Aires? ¿Cómo se metamorfoseó y enmascaró el deseo eterno de procrear fuera de los medios biológicos disponibles, fuera de la cópula heterosexual? Los textos de Quiroga y Borges ofrecen una posible trayectoria de las subjetividades nacionales que, al final del siglo, Soriano captó entre las portadas de El ojo de la patria.