Eduardo Acuña Zumbado
Gabriella infinita (1995, 1998-99 y 2005), de Jaime Alejandro Rodríguez y Carlos Roberto Torres Parra, es un hipermedia narrativo que en su última representación le ofrece a su lector-usuario la posibilidad de secuencias narrativas heterogéneas y la oportunidad de poder escoger entre ellas al activar los vacíos-hiperenlaces que producen las potenciales continiudades narrativas de lexia a lexia. En esta hipernovela, el acto de lectura no sólo es multilineal, sino que está caracterizado por la inestabilidad física del texto que se hace un elemento constitutivo y diferenciador del proceso de interacción entre lector y texto. En tal inestabilidad, el hiperenlace designa un vacío que al intentar ser llenado por el lector-usuario, pone en movimiento diferentes elementos textuales (i.e., aparentes discontinuidades cronológicas, cambios de focalizaciones, a veces indiscernibles, entre narrador y personajes, y elipsis en tiempo narrativo) que proyectan en el lector-usuario, no la necesidad de completarlos, sino de combinarlos para tratar de dar coherencia a su acto de lectura de la novela. Esta necesidad de conexión, que proyectan los hiperenlaces, produce la indeterminación en Gabriella infinita y su efecto para el sujeto-lector es confusión y mayor complejidad textual.