Peter Cocozzella
En 1458 Joan Roís de Corella (1435-1497), destacada figura representativa de la literatura valenciano-catalana de principios del Renacimiento, redactó Tragèdia de Caldesa, monólogo dramático bastante corto, presentado por completo desde la perspectiva de la persona poética del autor. Al plantear un argumento a favor de una teatralidad plenamente alcanzada en el monólogo en cuestión, aquí se aducen dos proposiciones radicales: 1) Tragèdia de Caldesa es pieza dramática, apta para una representación escénica; 2) es, además, tragedia en pleno sentido del término. Lo que se intenta evidenciar es que Corella pone en juego las técnicas mnemónicas de la écfrasis e imago agens —las mismas que estriban en la tradición retórica, en la cual brillan Cicerón, Quintiliano y los ilustres sucesores de ambos que florecieron en la era medieval. Se exploran, paso seguido, tres aspectos principales de la empresa creativa de Corella: 1) la iniciativa atrevida de la protagonista (Caldesa) en poner en práctica su plan transgresivo; 2) el acondicionamiento de la trama como vehículo de un expresionismo amargado y narcisista de acuerdo con la reacción melancólica del hablante (narrador de primera persona); 3) el proyecto de amoldar el monólogo a la forma de un tipo de drama poco conocido, que algunos críticos han dado en llamar auto de amores.
In 1458 Joan Roís de Corella (1435-1497), a prominent exponent of Valencian-Catalan literature of the early Renaissance, authored Tragèdia de Caldesa, a short dramatic monologue presented from the exclusive perspective of the auctorial persona. Arguing in favor of the full-fledged theatricality of the monologue in question, I advance two radical propositions: 1) Tragèdia de Caldesa is a play; 2) it is, indeed, a tragedy. As I try to show, Corella employs the mnemonic techniques of ekphrasis and imago agens that stem from the rhetorical tradition, eminently represented by Cicero, Quintilian, and their illustrious followers in the Middle Ages. I proceed to explore three main aspects of Corella’s creative enterprise: 1) the bold initiative of the female protagonist (Caldesa) in setting in operation her transgressive plot; 2) the speaker’s melancholic reaction, which conditions the mutation of the plot into a vehicle of bitter, narcissistic expressionism; 3) the molding of the monologue into the format of a little-known dramatic genre (the so-called auto de amores).