Valeria A. Belloro
En lenguas de orden de constituyentes flexibles, tal como es el caso del español, las variaciones en el orden de los constituyentes de la oración —o, como comúnmente se le denomina, en el “orden de palabras”— es uno de los dominios regios en los que se expresan o se reflejan, entre otras, distinciones de orden semántico, pragmático y prosódico.
En efecto, un cierto orden de palabras preferido puede estar asociado a la semántica particular del predicado, a su transitividad, o corresponderse con determinados contornos melódicos, o servir para señalar un determinado significado pragmático. Así, el eje que adopta el volumen, el “orden de palabras”, es atinadísimo en la medida en que reúne aportaciones de diversos investigadores trabajando desde distintos niveles de análisis. En todos estos niveles —la sintaxis, la semántica, la pragmática, la prosodia— el orden de palabras es el terreno en el que se encuentran sus distintas perspectivas, y de este encuentro resulta una visión integradora de los diversos factores que afectan el orden de palabras y, en general, del funcionamiento gramatical del español.