Javier Martínez Villarroya
El éxito rotundo del discurso que Steve Jobs profirió en Stanford se debe a dos razones no evidentes: el uso eficaz de la tópica literaria clásica y el apego a la estructura del monomito. Jobs se presenta a sí mismo como el héroe redimido que regresa al mundo para liderarnos en un nuevo comienzo. Para combatir contra el modelo de éxito que ensalza (inequívocamente el sistema político predominante), proponemos una tópica mitológica, es decir, la inclusión de la mitología en los análisis políticos, sociales y discursivos de la sociedad contemporánea, pues sin ella nuestra vulnerabilidad ante los medios continuará creciendo