Alar Kein
Los deportes y las expresiones de nacionalismo van juntos. Al fijarnos en las relaciones políticas y culturales globales entre el Norte y el Sur estamos obligados a ver las repeticiones históricas de siglos de extracción del trabajo y recursos humanos por los ricos caciques americanos y europeos. Pero es difícil ver el funcionamiento de las relaciones neo-coloniales en el lenguaje aséptico de la relaciones internacionales de las organizaciones deportivas y sus presentaciones corporativas; continúan, sin embargo, justo bajo la superficie. El estudio de las relaciones entre la Liga Mayor de Béisbol y la situación del béisbol en la República Dominicana se fija en los esfuerzos continuados de la primera para “minar” el talento de una forma tan barata, como ya sucedió en el pasado, pero enfrentándose a un poder de resistencia de abajo cada vez mayor. Sin embargo, ante este poder y la creciente resistencia que viene de abajo, la hegemonía americana, que funciona con tanto éxito en otras áreas de la economía y la cultura dominicanas, se ve cuestionada a través de este deporte. En este artículo se hace evidente cómo un sector no regulado del mundo del béisbol dominicano se ha hecho con el control del talento joven y está intentando cambiar la dinámica de poder de este deporte. También están ocurriendo otros cambios políticos y económicos —algunos planificiados, otros no buscados— que indican una acentuada presencia dominicana que se expresa en el nacionalismo de la resistencia.
Sport and expressions of nationalism go hand-in-hand. In looking at political and cultural relations between the global North and South, we have to see them as iterations of centuries of ruthless extraction of human toil and resources by wealthy European and American overlords. But, in the sanitized language of contemporary international sporting bodies and their corporate presentation of self it is difficult to see the neo-colonial relations at work. They continue, however, just below the surface. This study of the relationship between Major League Baseball and the Dominican baseball scene looks at the continued efforts of the former to “mine” talent as cheaply as in that past. In the face of growing power and resistance from below, however, American hegemony that operates so successfully in other areas of Dominican economy and culture, are, in this sport being challenged. I show how an unregulated sector of the Dominican baseball world has wrested control of young talent and is attempting to change the power dynamics in the sport. There are other political and economic changes ― some planned, and others unintended going on as well, and they all indicate growing Dominican presence couched in the nationalism of resistance.