Humberto López Cruz
Dulce María Loynaz ha mostrado una marcada fascinación por el agua como elemento vital de expresión de poesía. Este trabajo pretende enfrentar la idea expuesta en Juegos de agua: Versos del agua y del amor para adentrarse en la mirada de la isla que ofrece Loynaz, pero intentando descubrir la construcción, o destrucción, del enunciado fronterizo que se percibe entre los versos. En el poemario discurre un agua primordial para la vida, y asentamiento propio, de la nación cubana; los poemas entregan un agua que, liberada de sus cauces restrictivos, avanza para acceder otros derroteros y no para limitar la geografía nacional. Es por esto que resulta atrayente indagar cómo una lectura de afirmación nacionalista puede coadunar su designio con unos versos, que leídos con cautela, facilitan una interpretación de presencia, y permanencia, fuera de lo que hasta entonces se ha conocido como el territorio cubano.