El escenario educativo está cambiando y la demanda de revoluciones pedagógicas es cada vez más fuerte en los contextos económicos y sociales contemporáneos. En este artículo veremos cómo también la clase de español como lengua extranjera está involucrada en este movimiento, introduciendo el punto de vista de la arquitectura pedagógica. La intervención en el espacio del aula implica una profunda revisión metodológica y, en particular, va a apoyar dos peculiaridades de la adquisición de un idioma extranjero: el aporte multisensorial del input y la calidad de los flujos relacionales y de la comunicación.