Este texto explora alguna de las aportaciones que ofrece la tecnología educativa a la tarea de crear utensilios flexibles y amoldables a la etapa en la que se encuentre el alumno en cierto periodo de su aprendizaje. Concretamente nos proponemos sintetizar aquí los resultados de una serie de experimentos realizados a fin de crear un recurso autónomo para aprender el vocabulario de la lengua meta, en este caso el castellano, para estudiantes universitarios holandeses.