Paul Brian Nelson
Considerada poesía culta, las serranillas del Marqués de Santillana no lo son. De hecho, siguen el modelo de las pastourelles francesas y establecen una expectativa erótica. Es más, le ofrecen al narrador una tarima desde donde jactarse de sus aventuras. Las serranillas probablemente se escribieran como obras de tono subido, destinadas a ofrecer un entretenimiento indecente. Según esta idea, la Serranilla III se ha malinterpretado, ya que los críticos la ven sólo como una obra de elogio por la belleza de esta serrana, cuando en realidad, la respuesta implícita de ella y su atuendo caro indican que es una prostituta.
The Marqués de Santillana’s serranillas are generally revered as lofty poetry. However, the poetic situations they present, patterned on French pastourelles, establish a risqué expectation and offer the male narrator a platform from which to boast about his sexual exploits outside of court. The serranillas were likely written as bawdy works, aimed at providing ribald entertainment. Serranilla III has been misinterpreted as a work written merely to praise its serrana’s great beauty, when in fact her receptive reply to the narrator and her expensive outfit indicate that she is a prostitute.