Manuel de Jesús Llanes García
En el presente artículo proponemos la representación del cuerpo, sobre todo femenino, como una de las claves de análisis de Santa (1903), la novela de Federico Gamboa. Al tratarse de la historia de una prostituta, quien además viaja desde el campo hasta la ciudad, entran en juego multitud de factores que están relacionados con el contexto de una gran ciudad que aspira a ser moderna, en el México de Porfirio Díaz. Al mismo tiempo que Santa deja la seguridad del hogar materno, entra en contacto con la metrópoli en la cual será finalmente destruida, luego de ser deseada por todos y socorrida apenas por algún enamorado que la idolatra. La novela, a pesar de responder a un conservadurismo de corte católico (Gamboa es un creyente confeso), pone de manifiesto una sexualidad femenina que la mirada del hombre aspira a poseer y controlar. Así, el cuerpo de la joven se vuelve el centro alrededor del cual gravita un conjunto de fenómenos que integran una novela acerca de aquello que en México es contado de forma subrepticia: el mundo de la prostitución.