A la hora de escribir un nombre propio en serbocroata debemos tener en cuenta dos aspectos importantes: en primer lugar si se trata de un nombre propio bosnio, croata, montenegrino, serbio o extranjero y en segundo lugar, si utilizamos como lengua de comunicación la variante croata o serbia. Si bien el primero de los puntos puede parecer evidente, no lo es tanto si tenemos en cuenta el segundo punto que hemos destacado. Los nombres propios ya sean serbios croatas, bosnios o montenegrinos, no sufren ninguna modificación fonética a la hora de escribirlos. El uso de un alfabeto u otro (cirílico o latino) no varia en absoluto la pronunciación de los mimos ya que ambas grafías poseen una equivalencia fonética idéntica. Sin embargo, los nombres propios extranjeros si que pueden sufrir transformaciones dependiendo de si nos decantamos por la variante serbia o por la croata. La variante serbia adapta fonéticamente los nombres propios a su sistema fonético, es decir, si encontramos un nombre propio extranjero en una texto en serbocroata en el que se utilice la variante serbia, este aparecerá trascrito. Esta trascripción se debe sobre todo a motivos históricos y se lleva a cabo independientemente de si utilizamos el alfabeto latino o cirílico.
Esta trascripción, sin embargo, no se lleva a cabo si utilizamos la variante croata. En este caso, a la hora de escribir se respetara la grafía del nombre propio tal y como aparece en su lengua original. El uso de una opción u otra tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Lo que si es importante es tener muy presente este aspecto porque, de no respetarlo, podremos estar realizando un error ortográfico.