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Qiang Sun, Lawrence Jun Zhang
El presente trabajo trata de averiguar a través de un estudio experimental la eficacia de tres modalidades de enseñanza, a saber, la modalidad en línea, la mixta y la presencial, en las aulas de inglés universitarias chinas, con el fin de ayudar a los profesores de inglés a conocer las ventajas y desventajas de las modalidades referidas y, de ahí facilitar su desarrollo profesional. En el experimento se han seleccionado primero tres grupos de estudiantes con los que se han adoptado respectivamente la modalidad de enseñanza en línea, la combinada y la presencial, para luego examinar el rendimiento de los estudiantes en el examen semestral. Los resultados del análisis de la varianza con un factor (ANOVA) conducen a la conclusión de que el grupo que ha recibido la modalidad de enseñanza presencial ha rendido mejor en comparación con los otros dos grupos, mientras que las entrevistas en grupo con los estudiantes dejan en claro que las modalidades tanto en línea como mixta constan de más perjuicios que beneficios. Los resultados del estudio demuestran que, siendo un modelo pedagógico emergente y popular en la epidemia, la enseñanza en línea aún no es capaz de reemplazar la enseñanza presencial en términos del rendimiento y la cognición de alumnos en el estudio. Y las conclusiones de este artículo sirven como referencias para el desarrollo y la formación de los profesores de inglés.
Teacher professional development (PD) is an essential part for teachers’ professional growth for the quality provision of education to their students. Nonetheless, we need to find out effective ways of professional development. This study was conducted to achieve this goal by exploring the effectiveness of three teaching modes, online, blended, and face-to-face delivery, of an EFL course in a Chinese university, with the ultimate aim of promoting their PD. Three intact English classes were treated differently with Class 1 receiving online teaching, Class 2 receiving blended teaching, and Class 3 receiving face-to-face teaching. Their learning outcome was measured by an end-of-semester test. One-way ANOVA results showed that the face-to-face (onsite) teaching class performed significantly better than the other two classes. Focus group interviews of students revealed more drawbacks of online teaching than benefits. The findings suggest that online teaching, as a new teaching mode that has gained popularity due to the pandemic, cannot replace face-to-face teaching in terms of students’ learning outcomes and their perceptions toward online teaching currently. Such findings provide food for thought for EFL teachers with regard to their own professional development.
