María Rosa Palazón Mayoral
Todo el mundo sabe que los dioses son veleidosos, que exigen fe y rituales, que se les nombre de manera inequívoca, que se les invoque con un lenguaje sumiso y obediente. Según los quichés el Rayo, el Relámpago y el Huracán dijeron: hágase la Tierra, que brote de las aguas llenando el vacío de un cielo en suspenso.