Elena Caro Sánchez
Tras el anuncio del cese definitivo de la actividad armada de ETA, ha habido un cambio de paradigma en el tratamiento de la violencia en el País Vasco desde la fábula, pues este hecho abre la posibilidad de comenzar a pensar un futuro desde los conceptos perdón y culpa. El conflicto político-social que aborda Borja Ortiz de Gondra en sus piezas Los Gondra (una historia vasca) y Los otros Gondra (un relato vasco), explora la necesidad de construir un relato posmemorial poniendo el foco en la indiferencia de aquellos ciudadanos que, ante la violación de los derechos humanos de sus vecinos, amigos, o incluso familiares, guardaron silencio y miraron hacia otro lado. Ortiz de Gondra se alza así como la voz de una segunda generación, la generación de la posmemoria, que exige rendir cuentas, sin tapujos, a una sociedad encerrada en el miedo y la sumisión, construyendo un relato acerca de los límites del resentimiento y el perdón.
After the announcement of the definitive cessation of ETA's armed activity, there has been a paradigm shift in the treatment of violence in the Basque Countre from the fable, since this fact opens the possibility of starting to think about a future from the concepts of forgiveness and guilt. The political-social conflict that derives from the formation of the nationalist armed band has been treated mainly in novels and essays, but the autofictional contribution of Ortiz de Gondra, with his pieces Los Gondra (una historia vasca) and Los otros Gondra (un relato vasco), has an innovative character, since in them the playwright explores the need to build a postmemorial story focusing on the indiffer-ence of those citizens who kept silent and looked the other way.