A Coruña, España
La reconstrucción del pasado traumático español es una constante en las novelas de Marta Sanz, que ha dedicado tres ficciones —“Los mejores tiempos” (2001), “La lección de anatomía” (2008) y “Daniela Astor y la caja negra” (2013)— a revisar la Transición española y su "pacto de silencio". Con un propósito similar, su penúltimo trabajo, “pequeñas mujeres rojas” (2020), que da cierre a la trilogía negra que comenzó una década antes con “Black, black, black” (2010) y “Un buen detective no se casa jamás” (2012), se propone extraer del olvido y del abono de la mala memoria el relato de las víctimas de la Guerra Civil y el franquismo, a través de una propuesta narrativa que vincula estrechamente los conceptos de "hauntología" (Derrida 1993) y "posmemoria" (Hirsch 1997). Un doble marco teórico que ha suscitado la estructuración de las páginas centrales de esta investigación en torno a tres aspectos clave de la novela: "legado", que reflexiona acerca de las naturalezas opuestas de las herencias recibidas por ambas partes del conflicto; "fantasma", que aborda las diferentes presencias espectrales que acosan a la novela; y "fosa", que estudia los diversos trabajos de duelo que se están llevando a cabo en la ficción. A través de este análisis se pretende demostrar cómo Marta Sanz denuncia, principalmente por medio de un uso político de la figura del fantasma y la elección de una estructura especular en su novela, la persistencia del trauma dictatorial en las generaciones siguientes, así como la extrema dificultad que acarrea todo intento de reparación de la memoria de las víctimas.
The reconstruction of the Spanish traumatic past is a constant in Marta Sanz’s novels, who has dedicated three fictions —“Los mejores tiempos” (2001), “La lección de anatomía” (2008) and “Daniela Astor y la caja negra” (2013)— to review the Spanish Transition and its "pact of silence". In the same spirit, her latest work, “pequeñas mujeres rojas” (2020), which closes the hardboiled trilogy that she ini-tiated a decade earlier with “Black, Black, Black” (2010) and Un buen detective no se casa jamás (2012), aims to remove the story of Spanish Civil War and Francoism’s victims from oblivion and distorted memory discourses, by means of a narra-tive proposal closely linked to the notions of "Hauntology" (Derrida 1993) and "Postmemory" (Hirsch 1997). A double theoretical framework that has led to the structuring of the central pages of this paper around three key aspects of the novel: "legacy", which reflects on the opposite natures of the legacies received by both sides of the war conflict; "ghost", which tries to identify the different spec-tral presences that haunt the novel; and "mass grave", which studies the various works of mourning that are being carried out in the fiction. This analysis aims to demonstrate how Marta Sanz denounces, mainly through a political use of the figure of the ghost and the disposition of a "frame tale" structure in her novel, the persistence of dictatorial trauma in the following generations, as well as the extreme difficulty that any attempt to repair the memory of the victims entails.