Este estudio examina las diferencias culturales que, a partir de los gestos, suelen darse en la comunicación interpersonal entre estudiantes de español como lengua extranjera y hablantes nativos de nuestra lengua. La investigación toma como punto de partida la muestra de gestos españoles presente en el Diccionario de gestos españoles (DGE), que es contrastada con un corpus de gestos que hemos recopilado a partir de un trabajo de campo llevado a cabo con estudiantes universitarios chinos, georgianos (en este caso, no solo estudiantes) y rusos. La investigación previa indicó que había principalmente nueve fenómenos culturales en los que se presentaban diferencias entre estas cuatro culturas: tauromaquia, refranes, jerga de jóvenes, supersticiones, objetos de uso cotidiano, descripciones de carácter, expresiones y/o frases hechas, simbología religiosa, expresiones imperativas.
Se somete a prueba diversas hipótesis cuyos resultados indicaron que, de 179 denominaciones de gestos, sin contar las diferentes variantes de algunos de ellos, 125 son emblemas absolutos en las cuatro culturas y 54 gestos presentaron algunas diferencias en sus significados o realizaciones. Uno de los objetivos de la investigación consiste en analizar las equivalencias de los gestos del DGE con los aparecidos en hablantes de chino, ruso y georgiano. Una vez llevado a cabo el listado de estos gestos, se procede a realizar su descripción y comparación intercultural para, de este modo, poder establecer estrategias didácticas que puedan tener aprovechamiento en la programación de una clase de español para alumnos de dicha procedencia. La muestra de chinos incluye a 4 individuos, la de rusos también a 4, y la de georgianos a una veintena de personas, con los que se lleva a cabo el estudio comparativo de los gestos y su posterior integración en el currículum de Español Lengua Extranjera (ELE) del Instituto Cervantes. A partir de ahí, se elaboran propuestas didácticas para mejorar el proceso de enseñanza y aprendizaje de los gestos españoles de manera integrada en las clases de español, de modo que estas puedan ser aprovechadas, ya sea en materiales docentes de ELE o en recursos para profesores en el aula.
Aunque las aplicaciones del estudio pueden ser variadas, existe un doble objetivo final en el ámbito de la enseñanza y aprendizaje del español: por un lado, proveer a los profesores de español de un material contrastivo en el ámbito intercultural que pueda ser utilizado posteriormente en el aula; por otro, dotar al alumno de un corpus contrastivo que pueda servir directamente a estudiantes de español que deseen enriquecer su comunicación verbal con la no verbal.