El objetivo de este estudio es describir el desarrollo de la competencia lingüística escrita en ruso como lengua extranjera por parte de aprendices bilingües (catalán / castellano) de edad adulta (n = 83) en contexto de instrucción formal (IF ), en concreto en una modalidad de cursos extensivos. La muestra incluye cuatro grupos correspondientes a niveles consecutivos de una escuela oficial de idiomas catalana (1-4). A tal fin se lleva a cabo un estudio longitudinal, con un diseño pretest - postest, con dos tiempos de recogida de datos para cada nivel, y a la vez un diseño transversal para los cuatro niveles. Los datos obtenidos se contrastan con las de la producción escrita de un grupo de hablantes de ruso como L1 (n = 30), con el objetivo de establecer relación con su nivel de habilidad en cuanto a la producción escrita . El estudio tiene dos objetivos específicos: a) evaluar el progreso alcanzado por los cuatro grupos de participantes no nativos con respecto a las áreas de complejidad, corrección y fluidez de la escritura, a lo largo de un año natural, medido en dos tiempos (febrero a febrero), y transversalmente a lo largo de 4 años; b) mostrar el nivel de proficiencia logrado con respecto al uso del caso en ruso longitudinalmente. Los datos se recogieron a partir de una tarea consistente en un relato que los participantes tenían que escribir en un máximo de 40 minutos, a partir de unas imágenes. Posteriormente, los resultados se han contrastado con los del grupo de participantes nativos (n = 30) que realizan la misma tarea en un solo tiempo. Los análisis estadísticos revelaron que 150 h de IF inciden significativamente en el G1, pero no en el G2, el G3 o G4. Más específicamente, el G1 mejora significativamente en la complejidad sintáctica medida a través del total de cláusulas para oración y el total de cláusulas dependientes por oración; en la complejidad léxica medida a través del índice de Guiraud; y en la fluidez medida a través de la contabilización del número de palabras por 40 minutos. El G1, el G2, el G3 y el G4 muestran medias significativamente más bajas que el grupo nativo en las medidas de complejidad léxica, corrección y fluidez, pero no en la complejidad sintáctica. Los análisis cualitativos han mostrado que al cabo de 150 h de IF el G1, el G2, el G3 y el G4 no mejoran ni en la cantidad ni en la calidad en el caso en cuanto a su uso y corrección. En conclusión, parece que este estancamiento en cuanto al progreso en las habilidades de escritura de los niveles 2, 3, y 4 se podría explicar por la falta de input y práctica en la lengua meta, que se podría solucionar con más trabajo individual fuera del aula y estancias en un país de habla rusa.