Por investigación sobre aproximativos se entiende una línea de estudios en torno a las propiedades lingüísticas que presentan las formas del tipo casi y apenas. Esto es, formas que expresan cercanía a un predicado, al tiempo que lo niegan en algún punto; esta cercanía o denotación escalar se ha venido a llamar componente próximo y la negación con que se articula, componente polar. De carácter eminentemente teórico, esta línea de investigación se ha desarrollado –en los últimos cuarenta años– en el ámbito anglosajón, cuyo interés se ha centrado en voces como almost o barely y las implicaciones semántico-pragmáticas que de ellas se derivan. En este sentido, si bien existen precedentes en otras lenguas (es clásico el trabajo de Li 1976 sobre la partícula del mandarín chā-yīdiar), la discusión lingüística sobre el funcionamiento de los aproximativos ha problematizado, principalmente, la descripción de la forma inglesa almost. Esa descripción ha involucrado tanto posturas de la pragmática teórica (el trabajo inaugural de Sadock 1981 y las reformulaciones posteriores de Ziegeler 2000, 2010, 2016), como sucesivas revisiones semánticas de corte formal (Horn 2002, 2009, 2011). En esta discusión teórica, destacan dos perspectivas: una estrictamente discursiva (que acude a justificaciones extralingüísticas) y otra transversal (semántico-pragmática). Sin embargo, este debate se halla actualmente en un punto muerto; ninguna de estas dos perspectivas profundiza en el funcionamiento de los aproximativos dentro de sus contextos de uso, ni en las posibles diferencias entre almost y los aproximativos de otras lenguas.
La investigación sobre aproximativos, pues, se ha caracterizado por el análisis onomasiológico de almost y la explotación deductiva de sus repercusiones semántico-pragmáticas en enunciados ad hoc del inglés. No obstante, algunos trabajos (Amaral 2008, Pons Bordería y Schwenter 2011) han apuntado tres carencias explicativas en esta orientación. La primera, una pretendida replicabilidad del funcionamiento de los aproximativos ingleses en otros sistemas lingüísticos; la segunda, la utilización de ejemplos inventados para las generalizaciones teóricas; la tercera, la asunción de que el significado próximo-polar es independiente de condicionantes contextuales. Nuestra investigación pone de manifiesto estos tres problemas teóricos y plantea una vía de salida alternativa a la bibliografía tradicional: crítica a la presunción de universalidad a partir de las diferentes extensiones de significado que presenta la forma hispana casi, acercamiento a ejemplos de casi mediante un corpus de muestras del habla coloquial y análisis de la susceptibilidad de este aproximativo a ciertos contextos discursivos.
Nuestra investigación diferencia los aproximativos de otros elementos de la vaguedad con los que están emparentados y organiza, bibliográfica y teóricamente, las propiedades descritas para estas formas en gramática, semántica y pragmática. A este estado de la cuestión, sigue un estudio de la forma casi en la conversación coloquial española, a fin de estudiar las restricciones contextuales que influyen en el significado próximo-polar; y, por otra parte, el análisis de tres construcciones no adverbiales con un funcionamiento igualmente aproximativo. La metodología seguida es construccional y se apoya en un modelo de segmentación en unidades discursivas para perfilar los contextos de aparición de las construcciones aproximativas (sean estas adverbios léxicamente univerbales o estructuras más complejas). Mediante este acercamiento, se observa un funcionamiento de lo aproximativo en diferentes parcelas del sistema lingüístico, lo cual permite organizar los componentes de significado que intervienen en su descripción. Se vuelve, en conclusión, sobre la elaboración de un marco teórico con el que abordar el fenómeno de la aproximación lingüística, más allá de su materialización en una u otra construcción y como un campo de estudio propio.