
, Benito Rial Costas (secret.)
, Antonio Castillo Gómez (voc.)
, Pedro José Rueda Ramírez (voc.)
, Manuel José Pedraza Gracia (voc.) 
La imprenta se instaló a finales del siglo XV en el reino de Navarra, aunque su temprano asentamiento se vio interrumpido durante unas décadas hasta mediados de la siguiente centuria. A partir de entonces podríamos decir que el negocio editorial se consolidó en aquellas tierras, si bien fue a partir de 1600 cuando se gestó un auténtico entramado tanto de producción como de comercialización del libro. Así, cabe afirmar que el libro navarro alcanzó a lo largo del siglo XVII una etapa de verdadero apogeo al coincidir con toda una serie de impresores y libreros muy exitosos, lo que aumentó exponencialmente la producción impresa.
Esta realidad ya se percibía a través de los trabajos bibliográficos elaborados entre los siglos XIX y XX por eruditos locales, caso de Altadill, Arigita o Pérez Goyena. Sin embargo, la aparición de nuevos testimonios impresos navarros ha puesto de manifiesto la necesidad de actualizar lo que se conocía sobre la imprenta y el libro en la Navarra del siglo XVII. De este modo, la presente tesis doctoral ha pretendido redescubrir la producción editorial que tuvo lugar en las prensas locales durante dicha centuria, por lo que se establecieron prioritariamente los siguientes objetivos: 1. Localizar en archivos y bibliotecas nuevos impresos editados en las prensas navarras entre 1601 y 1700, para así conseguir actualizar su panorama editorial.
2. Elaborar una adenda bibliográfica, actualizando así nuestros conocimientos sobre el patrimonio bibliográfico local.
3. Ofrecer a los investigadores del libro un instrumento informativo en forma de repertorio bibliográfico que agilice y facilite su trabajo.
Como se podrá comprobar, todas esas novedades impresas nos han permitido elaborar una adenda bibliográfica con 265 referencias que vienen a complementar al Ensayo de bibliografía navarra de Antonio Pérez Goyena. Unido a esto, no debemos olvidar que la aparición de impresos fraudulentos o ilegales se generalizó con bastante asiduidad a lo largo del Siglo de Oro. Tanto es así que hemos advertido este fenómeno tras algunos pies de imprenta y colofones presentes en diversos productos y géneros editoriales que fingieron ser publicados en Pamplona o en otras localidades navarras entre 1601 y 1700, lo que esperamos que pueda servir de ayuda a otros investigadores o estudiosos en sus futuros trabajos.
Asimismo, este estudio de naturaleza bibliográfica se ha visto enriquecido con la consulta y el análisis de testimonios archivísticos (principalmente pleitos judiciales y todo tipo de escrituras notariales), gracias a lo que hemos conseguido actualizar nuestros conocimientos sobre la imprenta y el negocio del libro. Entre otras cuestiones, se han descubierto nuevos impresores y libreros que trabajaron puntualmente en Navarra, al mismo tiempo que se ha actualizado el volumen de impresos que salieron de las prensas locales, prestando una especial atención a los géneros más representativos y olvidados (textos administrativos, alegaciones en derecho o porcones, tesis y conclusiones, sermones o relaciones de sucesos, entre otros impresos). A esto se une que también nos hemos interesado por el diseño y la confección del impreso, es decir, se ha tratado de conocer la intrahistoria de algunos de los textos que se publicaron en el reino, sin olvidarnos tampoco de las redes y los flujos comerciales del libro.
Más allá de esto, lo realmente reseñable es que la consecución de los objetivos propuestos ha provocado que las nuevas referencias bibliográficas aportadas en esta tesis doctoral supongan un 28 % del total de la producción impresa que tuvo lugar en tierras navarras durante el siglo XVII. Es decir, de los 945 impresos contabilizados se referencian aquí 265, lo que representa un aumento exponencial y nos permite mejorar sobremanera nuestros conocimientos sobre el patrimonio bibliográfico navarro. En definitiva, la presente investigación nos ayuda a redescubrir la imprenta y el libro en Navarra entre 1601 y 1700.
The printing press was installed at the end of the 15th century in the kingdom of Navarre, although its early settlement was interrupted for a few decades until the middle of the following century. From then on we could say that the publishing business was consolidated in those lands, although it was from 1600 onwards when an authentic framework of both production and commercialization of the book was developed. Thus, it can be affirmed that the navarrese book reached a stage of true apogee during the 17thcentury coinciding with a series of very successful printers and booksellers, which exponentially increased the printed production. This reality could already be perceived through the bibliographic works elaborated between the 19th and 20th centuries by local scholars, such as Altadill, Arigita or Pérez Goyena. However, the appearance of new printed testimonies from Navarre has revealed the need to update what was known about printing press and books in 17th century Navarre...