Andrés Leandro Saab
En este trabajo, exploro las llamadas oraciones capicúas típicas del español rioplatense (e.g., ¡Vino Juan, vino!). Propongo que las capicúas se derivan mediante el movimiento del verbo a una posición alta en la periferia de la cláusula seguido del movimiento de todo el predicado remanente a una posición también periférica. En la forma fonética, la copia del verbo en el predicado remanente y la de la oración principal no son reconocidas como copias del mismo ítem léxico y, en consecuencia, deben pronunciarse por separado. Argumento también que las capicúas echan luz sobre otros fenómenos de dislocación de predicado en español y sobre el problema general de la variación dialectal. Finalmente, discuto brevemente otro tipo de doblados verbales en lenguas románicas y no románicas.
El hecho de que este fenómeno se atestigüe en otras lenguas indica que no hay diferencias esenciales entre micro y macrovariación.