En los últimos años, la introducción en los estudios lingüísticos de herramientas procedentes de la Teoría de Prototipos ha desatado una fuerte controversia. Es cierto que, como todo cambio radical de perspectiva, esta aproximación ha conseguido apuntar problemas nuevos y enfocar de modo original otros ya antiguos pero la pretensión de ofrecer una propuesta global sobre la categorización coarta sus incursiones en el dominio lingüístico. Los prototipos se alzan como alternativa única frente a un panorama desgastado y, al amparo de la Psicología, constituyen lo que ha dado en llamarse Lingüística cognitiva. El entusiasmo de sus defensores cristaliza en corriente de investigación a partir de unas publicaciones que, de entrada, parecen escasas, alejadas del terreno lingüístico y de muy leve peso histórico, ya que apenas remontan la segunda mitad de la década de los setenta. Los indudables atractivos de esta opción no justifican la escasa atención que se ha dedicado a la elaboración de un aparato conceptual apropiado para los hechos del lenguaje. Parece, pues, necesario definir la noción de prototipo para aplicarla con todo rigor a la teoría lingüística.
In the last few years, the use in Linguistics of tools proceeding from the Prototype Theory has produced a hard controversy. As any radical change of perspective, this approach has pointed out new and interesting questions, but the claim to give an overall proposal about categorization restricts it too much. Prototypes seem to be the only choice against an old view, constituting the usually called cognitive Linguistics. So, a new programme of research arises just on the basis of a few works, away from Linguistics. The enormous attractiveness of this option does not justify such carelessness in the elaboration of a conceptual framework. This paper tries to define the notion of prototype in order to surpass this pre-theoretical stage and introduce it rigorously in linguistic theory.