Palma de Mallorca, España
La novela de Yejide Kilanko, Daughters Who Walk this Path (2012), explora la evolución de su protagonista, Morayo, hacia la autorreparación y el amor propio tras haber sufrido abusos sexuales. Este artículo profundiza en la formación de apegos emocionales y sentimentales de Morayo en su etapa adulta. Se postula que su novela sirve como una poderosa exploración del amor propio en medio de presiones sociales que se cruzan. Para esto, la atención se centra en la lucha de Morayo para confrontar su trauma en el contexto de las expectativas sociales de una “buena ciudadanía” nigeriana (Ahmed, 2014: 108), particularmente en lo que respecta al matrimonio y la sexualidad. Mi argumento es que la evolución de Morayo hacia la autorreparación es inherentemente autoimpulsado. En este sentido, exploro la agencia de Morayo al distanciarse de las imposiciones nacionales y consuetudinarias, posicionando su camino hacia el amor propio como una crítica de las expectativas sociales, dando testimonio del poder transformador de la agencia personal. Basándose en acontecimientos clave de la historia de Nigeria durante la década de 1990, el artículo examina la evolución del viaje de Morayo hacia el amor propio y lo contrasta con la propia trayectoria reparativa de Nigeria. Además, analiza la relación de Morayo con Kachi, su amor de infancia, y las tensiones que surgen de su adhesión a las normas sociales de masculinidad y romance. En particular, la atención se centra en cómo el camino de Morayo hacia el amor propio se ve amenazado por la voluntad de Kachi de seguir las leyes consuetudinarias nigerianas sobre masculinidad (Uchendu, 2008: 15) y las expectativas sociales relacionadas con el matrimonio y el amor romántico. En este contexto, se presentará el sentido de protección de los Morayo como una contribución positiva a reparar el daño que las expectativas de la masculinidad nigeriana ejercen sobre la autoestima de Kachi.
Yejide Kilanko’s novel, Daughters Who Walk this Path (2012) explores the journey of its protagonist, Morayo, towards self-reparation and self-love amidst the backdrop of sexual abuse and societal expectations in Nigeria. This article delves into Morayo’s formation of emotional and sentimental attachments as an adult. I argue that her narrative serves as a powerful exploration of self-love amid intersecting societal pressures. For this, the focus is on Morayo’s struggle to confront her trauma against the backdrop of societal expectations of Nigerian “good citizenship” (Ahmed, 2014: 108), particularly in what concerns marriage and sexuality. My contention is that Morayo’s journey towards self-reparation is inherently self-driven as a result of the social barriers that prevent her from developing self-pride. In this respect, I explore Morayo’s agency in detaching herself from national and customary impositions, positioning her journey towards self-love as a critique of societal expectations, testifying to the transformative power of personal agency. Drawing on key events in Nigerian history during the 1990s, the article examines Morayo’s evolving journey towards self-reparation and contrasts it with the Nigeria’s own reparative trajectory. Additionally, the article analyzes Morayo’s relationship with Kachi, her childhood love, and the tensions arising from his adherence to societal norms of masculinity and romance. In this sense, the focus turns to how Morayo’s path toward self-love is threatened by Kachi’s willingness to follow Nigerian customary laws on masculinity (Uchendu, 2008: 15) and social expectations involving marriage and romantic love. Against this backdrop, the Morayo’s sense of self-preservation and her love for Kachi will be introduced as positively contributing to repairing the damage that expectations of Nigerian masculinity exert upon Kachi’s self-esteem.