Argentina
La atenta observación de la obra cortazariana de los años 60 echa luz sobre la forma y sobre la capacidad de producir eventos semióticos novedosos, pero siempre a prueba. Los textos nimios – los llamaremos así por su brevedad- de los libros miscelánicos, casi cuadernos pasados a limpio, se dejan en el papel édito como si se hubiera detenido su proceso creativo.
Trabajar sobre la forma en un suspenso de su estabilidad despierta lecturas críticas e incluso incomprensión en su lectura especializada. Además, la idea de que Cortázar ha innovado radica en que opera sobre lo descartado. Por ello, la perplejidad de los textos que observamos es el movimiento permanente de rehacer, ya no la escritura sino el objeto, aquello que es visto o pensado desde un lugar que apenas si logra detener su recorrido escriturario para dejarlo instalado, estable. Leeremos un recorrido por algunos textos de Último Round, y La vuelta al día en 80 mundos, comprendiéndolos en un pensar perplejo que define en ello su proceso creativo.
Cortazar's writings from the 1960s show a preoccupation with form: new semiotic events as a work in progress. His miscellaneous books composed of minor texts – “minor” because of their brevity – can pass for notebooks, being a window into Cortazar's creative process.
Working with such unstable forms requires a critical reader, even though even professional readers can experience the same perplexity. Cortázar´s innovation comes from using what’s been cast aside. The perplexity of the texts comes from the work in progress effect of their object rather than of the writing itself. The object is seen or thought from a place that barely puts an end to the process of writing in order to leave it in a stable place. Through a series of close readings from The Final Round and Around the Day in Eighty Worlds, we will look into the effect of perplexity that defines their creative process.